Esperar

Día 2

Con Jesús por la mañana. “Había en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre honrado y piadoso, que esperaba la liberación de Israel y se guiaba por el Espíritu Santo” (Lc 2, 25). “Simeón y Ana eran personas de fe profunda y sabían esperar los tiempos de Dios y entrar en su manera de actuar” (Benjamín González Buelta sj). ¿Sabes esperar el tiempo oportuno de cada cosa o te arrebatas ante las dificultades? En este primer viernes jornada dedicada a orar por la intención del Papa ofrece tu día para que aquellos que tengan un poder material, político o espiritual no se dejen dominar por la corrupción.

Con Jesús por la tarde. El tiempo es superior al espacio (Segunda Parte). “Este principio permite trabajar a largo plazo, sin obsesionarse por resultados inmediatos. Ayuda a soportar con paciencia situaciones difíciles y adversas, o los cambios de planes que impone el dinamismo de la realidad” (Papa Francisco). La plenitud de las cosas se da en el tiempo. No caigas en la tentación de querer ver resuelto “todo” en el presente. Cultiva la paciencia alegre. Concreta un propósito para crecer en esperanza.

Con Jesús por la noche. Mirar los sentimientos. Serena las ideas y recoge tus emociones. Descubre algún detalle de cariño que hayas recibido y agradécelo. Mira en tu corazón los sentimientos de amor, de alegría y paz que has sentido hoy. ¿Recuerdas las circunstancias que los despertaron? Disfrútalos y conversa con el Señor de ellos. Ofrécelos y pide lo que deseas para mañana.